Trastornos de la eliminación

PIS EN LA CAMA

Generalmente en el control de esfínteres, la continencia de la caca se alcanza antes que la continencia del pis. El niño aprende a contener primero de día y después de noche.

En la enuresis, el niño se hace pis en sitios inapropiados como en la cama o en la ropa, generalmente de forma involuntaria. Para ser considerado un trastorno debe ocurrir al menos dos veces por semana durante tres meses consecutivos o causarle malestar. El niño tiene que haber cumplido al menos 5 años (edad a la que habitualmente controlan el pis).

La enuresis puede ser diurna, nocturna o puede presentarse como una combinación de ambas. Además, puede ser primaria o continua, si el niño nunca ha controlado la eliminación de la orina, o secundaria si aparece después de haber controlado el control de la orina durante 6 meses.

Son muchos los factores implicados en este tipo de trastornos.

A nivel fisiológico, se habla de que tienen una vejiga inferior a la normal, o una vejiga con una capacidad inferior a la normal. También se habla de una menor maduración del Sistema Nervioso Central.

A nivel conductual, se considera que se debe a un problema en el aprendizaje.
En la evaluación del trastorno el primer paso es determinar si la enuresis es funcional y no se debe a ninguna enfermedad orgánica.

También es importante conocer si el niño es capaz de discriminar cuando se encuentra la vejiga llena y si es capaz de retener la orina y retrasar su micción. También evaluaremos su evolución en otras áreas como el lenguaje o la motricidad, los antecedentes familiares, y la motivación para el cambio que tiene tanto el niño como sus padres.

Para la recogida de estos datos nos apoyaremos en la entrevista y en el empleo de registros, tanto para determinar la frecuencia, como su capacidad vesical y la presencia de despertares nocturnos.

La encopresis consiste en que el niño se hace caca reiteradamente en sitios o lugares inadecuados. Debe presentarse al menos un episodio al mes y durante un periodo no inferior a 3 meses. El niño debe tener al menos 4 años (edad a la que por regla general ya hay un buen control de las heces).

Este trastorno suele tener consecuencias a nivel social, el niño evita situaciones sociales porque otros niños hacen bromas y se ríen de él.

Suele presentarse durante el día, es muy rara la encopresis nocturna (al contrario que en la enuresis).

Los modelos biológicos, señalan una falta de madurez neurológica. También relacionan la encopresis con una situación de estreñimiento previo.

Al igual que en la enuresis, los autores conductuales, señalan la causa en un fallo en el aprendizaje de dicha enseñanza.

Para la evaluación se emplean entrevistas y registros conductuales.

Si la encopresis es primaria (de siempre) se trata de determinar si existen deficiencias en los hábitos de defecación, si hay o hubo retraso en otras áreas del desarrollo, el procedimiento de entrenamiento empleado y las dificultades que han podido surgir. En la encopresis secundaria (que surge después de que el niño ya haya tenido una época en que no se hacía caca) hay que determinar las condiciones ambientales que pueden estar en la base del origen y del mantenimiento de los episodios.

Habrá que evaluar si el niño tiene miedo, si deja de ir a determinados lugares por vergüenza, si percibe la necesidad de evacuar, la dieta y el ejercicio físico que hace, la presencia de otros problemas concomitantes, etc.

Una vez evaluados estos trastornos, el tratamiento principal es psicológico, pero a veces debe complementarse con tratamiento farmacológico.

Este trastorno suele tener consecuencias a nivel social, el niño evita situaciones sociales porque otros niños hacen bromas y se ríen de él.